- He visto esa película como quince veces, pero por mí la vemos una vez más.
Me refiero a la película “Cadena de favores”. Me sigue emocionando esa capacidad. Me parece excepcionalmente sencilla, basada en ideas “infantiles” como la de ‘Creer que se puede cambiar lo que te rodea’ (fácil, ¿verdad?)
Me gusta esa película, más que nada porque me devuelve la Fe en la gente, me da de nuevo un empujón para creer día a día en la utopía del “Es posible”
“En realidad el mundo no es exactamente una mierda, aunque supongo que es duro para aquellos acostumbrados a que las cosas sean como son, aunque sean malas, y no quieren cambiarlas, se dan por vencidos y entonces se sienten… como perdidos”
Trevor McKinney
es genial.. :)
ResponderEliminarCoincido contigo, Curro, en que la película es genial, pero a mí no me devuelve la fe en la gente. Supongo que yo soy de esas personas que se sienten "perdidas".
ResponderEliminarHe caído por aquí, a través de alguno de los blogs que sigues.
ResponderEliminarMe atrajo el nombre de tu blog: "Restos de un naufragio interior".
Pocos son los que no naufragan alguna vez en la vida, que, aunque corta, da para unas cuantas singladuras; y uno no puede sentir cierta empatía.
Tendré que ver la película, has motivado mi curiosidad y aunque la utopía no pueda lograrse pretenderla nos ayuda a caminar en el buen sentido.
Volveré para pasearme más a fondo por tu blog.
Un abrazo
Las ideas "infantiles" la mayoría de las veces son más inteligentes que las adultas, solo que tenemos un grave problema, no escuchamos a los niños...¿por qué? ¿porque no saben lo que dicen? ¿Porque son solo niños? La gente no los escucha porque tienen miedo a que les planten la verdad sin rodeos...es mucho más comodo darse por vencido y quejarse por lo que nunca se hizo...
ResponderEliminarUna película preciosa ;)
Me encanta la pelicula..y todo es posible, depende de la voluntad de uno.
ResponderEliminarBesos.
Mar