domingo, 4 de octubre de 2009

Hoy poesía

Todo dice que sí.

Si del cielo, lo azul,

y sí, lo azul del mar,

mares, cielos, azules

con espumas y brisas,

júbilos monosílabos

repiten sin parar.

Un sí contesta sí

a otro sí. Grandes diálogos

repetidos se oyen

por encima del mar

de mundo a mundo; sí.

Se leen por el aire

largos síes, relámpagos

de plumas de cigüeña,

tan de nieve que caen,

copo a copo, cubriendo

la tierra de un enorme,

blanco sí. Es el gran día.

Podemos acercarnos

hoy a lo que no habla:

a la peña, al amor,

al hueso tras la frente:

son esclavos del sí.

Es la sola palabra

que hoy les concede el mundo.

Alma, pronto, a pedir,

a aprovechar la máxima

locura momentánea,

a pedir esas cosas

imposibles, pedidas,

calladas, tantas veces,

tanto tiempo, y que hoy

pediremos a gritos.

Seguros por un día

- hoy, nada más que hoy -

de que los «no» eran falsos,

apariencias, retrasos,

cortezas inocentes.

Y que estaba detrás

despacio, madurándose,

al compás de este ansia

que lo pedía en vano,

la gran delicia: el sí.

Pedro Salinas:

La voz a ti debida, 1933

1 comentario:

  1. ¿cómo que nada más que hoy? ¬¬

    gracias por traer a mi poeta, hombre con suerte!

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