Madrugar. Hacer las cosas con prisa. Autovía. Atascos. Furgonetas. Ruta. “Fulanito no ha venido”. Sin esperas. El centro. Chavales. Saludos. Explicaciones. Café. Noticias nuevas. Taller. Compañeros. Papel reciclado. Excursión. Cotilleos. Compra. Campamento. Desayuno. Orden. Sobres. Ordenador. Música. Chavales. Almuerzo. “Cada uno a lo suyo”. “No puedes salir a la calle ahora”. Descanso. Pelar una manzana. Comida. Más compañeros. Las 3. Más música. Piruletas. Visita. “recoge tus cosas”. Taquillas. Rutas. Papelitos. “Cada uno en su casa…”. Vuelta al centro. A casa.
En fin: Volver al trabajo.
(Que no os engañe la entrada… Sufro lo mío…)
De obligada mención: Antonio S, gracias por “posar”
Con semejante compañero, entiendo que sufras lo tuyo...
ResponderEliminarSufriente!!! que no se te olvide sonreír! yo di una clase de literatura sentados en el patio en corro hablando de Cernuda y el amor! qué buena seño soy, muahaha!
ResponderEliminarSeguro que sufrirás lo tuyo.
ResponderEliminarPero... es de esos trabajos que tienen que gustarte para desarrollarlo bien; así que casí seguro que si estas ahí, es porque te gusta
-pese a que no deja de ser trabajo (en eso estoy contigo)-
Un saludo CEPEReño.